Tanto por su valor económico como sentimental, ver una de nuestras joyas dañadas nos disgusta y entristece. Por eso hoy vamos a ver cómo cuidamos en estos tiempos de pandemia nuestras joyas.

Sobre todo las sortijas que son las que más se exponen al uso frecuente de los desinfectantes que generan deshidratación en nuestras manos como en las joyas.

Por un lado, va a depender de los materiales de la piezas: con el oro amarillo de 18 Kt y el platino no va a haber problema, simplemente con lavarlas una vez a la semana con un cepillo suave, agua tibia y jabón neutro, aclarar bien y secar, será suficiente. Sin embargo, sí puede dañar el baño de rodio del oro blanco que habrá que pulir y rodiar de nuevo; como también se oscurecen los puntos de soldadura, cuya solución será el pulido de la pieza.

Por otro lado, están las gemas: diamantes, rubíes y Zafiros no se dañan, pero sí se pueden dañar las esmeraldas, turquesas, perlas y ópalos, cuya solución será mucho más compleja y costosa. Las piezas de coral que pueden resultar dañados, tienen la opción de pulido.

Por eso, debemos cuidar nuestra salud y la de nuestras joyas, las llevamos puestas y forman parte de nuestra personalidad. ¡Cuidaros mucho!